Un cartel joven para abrir boca, ¿Y por qué no? Un cartel muy joven de alternativa para un ciclo o serial de San Isidro en la plaza de toros de Vistalegre (Carabanchel) Las rarezas de la vida dentro de una pandemia. Pero, ¿Y por qué no?
Pues en la primera de este serial, o ciclo, o Feria de San Isidro, Lorenzo y Marín, cortaron una oreja cada uno en el segundo de cada lote. Simón, sigue en la línea de años anteriores. Pegar muchos pases, sin decir nada. Muchas veces, tirando del recurso del valor por arrebato y sin justificación. Y le pudo costar caro en el segundo de su lote.
Simón no encontró acople en el saludo capotero con el toro que abría el serial. Tras un puyazo excesivo, Jesús en la brega y Mambrú con los palos, desataron la primera ovación de la tarde. Lo más serio y destacado del primero de la tarde. El de El Pilar fue flojo aunque tuvo cierta bondad, sobre todo, colocando la cara para coger la muleta. ¿Y el torero de Barajas? Sufrió una voltereta sin consecuencias afortunadamente toreando por el izquierdo. Salvo eso, nada destacable pegando un sinfín de pases sin decir nada. Cerró la faena entre los pitones para no variar. Pinchazo y estocada tendida.
El cuarto de la tarde, feo y basto de hechuras, embistió según su morfología. Tras el encuentro con el caballo, el toro apretó en banderillas. Esos arreones de manso. Jesús Fernández fue volteado al intentar clavar, y Lorenzo hizo el milagro quitándole al toro con el capote. Y yo cada día, entiendo menos al torero de Barajas, (Que me perdonen sus partidarios) Pero brindar un toro sin condiciones…¿Y qué hizo Alberto? Estar por estar, y desgraciadamente, fue cogido toreando con la diestra. Un golpe fuerte y seco le levantó los pies del suelo. Estocada y golpe de descabello.
Lorenzo llegó al tendido toreando por verónicas. Le pegó buen aire al capote. El toro también tuvo buen aire de salida. En el caballo, metió la cara al igual que en banderillas. El toro en la muleta fue otro. Soltaba la cara cada vez que quería coger la franela. Fue querer navegar entre aguas turbulentas, sabiendo que el resultado sería nulo. Pero el toledano de alguna manera le robó algunos muletazos por ambos pitones, siempre bajo el reconocimiento del respetable, sabiendo que le podía levantar los pies del suelo. La faena fue larga y culminada con una estocada por todo lo alto.
El segundo de la tarde, no tuvo mal aire en el saludo capotero de Lorenzo. En el encuentro con el caballo, soltó la cara. (Apuntes de manso). Alberto Zayas con los palos, y Aguilar en la brega, dignificaron el tercio de banderillas, pues el toro no fue fácil. El toledano brindó al respetable, y acto seguido, le tuvo que robar los pases pues el de El Pilar, no quería embestir. Toro parado, soso, sin nada dentro para hacer el toreo. Álvaro lo intentó por ambos pitones pero sin lucimiento alguno. Estocada.
El tercero, tuvo buen son en el saludo capotero de Marín toreando por verónicas. Los lances calaron en los tendidos, sobre todo cuando cerró con la media. El toro en el caballo empujó. La templanza toreando por verónicas tras el puyazo, dejaron entrever las intenciones del torero. Tras un brindis de Marín al bueno de Lorenzo, el torero lo tenía claro. Lo menos claro, fueron las intenciones y las embestidas del toro. Ginés fraguó la faena sin dudas por ambos pitones. Todo de manera muy seria y sin vender humo, pero la obra no fue redondeada y no tuvo la repercusión suficiente en los tendidos por la condición del toro. Dos pinchazos y estocada.
Con el sexto, Marín armó el lío toreando por chicuelinas de salida. En el caballo, el puyazo fue ná y menos. Un quite variado intercalando chicuelinas con tafalleras y una revolera, la clave para levantar la tarde, y la antesala de lo que vendría en el último tercio. Ginés no escatimó en esfuerzos, y con la muleta, puso toda la carne en el asador. Le metió en la muleta por ambos pitones, comprometido consigo mismo. El toro le miró y en algunas ocasiones le hizo una radiografía. Más peligroso por el pitón derecho que por el izquierdo. No era fácil y pisó terrenos comprometidos. Con la zurda y a pies juntos, y tras sonar un aviso, cerró la faena. Lo despachó de una estocada.
FICHA DEL FESTEJO:
Plaza de toros de Vistalegre (Carabanchel) Toros de El Pilar. Desiguales de presentación y comportamiento, siendo el mejor para el torero el primero.
López Simón. Ovación con saludos en ambos
Álvaro Lorenzo. Palmas y oreja
Ginés Marín. Silencio y oreja
