Juan José Padilla recibió una grave cornada en el ojo en octubre de 2013 durante la Feria de Zaragoza. Diez años después del percance aún tiene secuelas y no podrá recuperar el ojo, ni la movilidad de la cara tal y como la tenía antes.
Sin embargo, el ‘Ciclón de Jerez’ se sobrepuso y siguió toreando reapareciendo tan sólo 5 meses después de la trágica cornada en la plaza de toros de Olivenza, superando todos sus miedos y los fantasmas del pasado.
Los toreros están hechos de otra pasta, y en especial Padilla quién ya hizo famosa su frase: “El triunfo es parte de la gloria”, y la pasada noche, el propio diestro jerezano, confesó en los micrófonos de “El Toril” de Onda Madrid que hizo para quitarse los fantasmas después de su percance de Zaragoza.
“Al principio de febrero, yo le pedí al ganadero de Ana Romero, Lucas Carrasco, (ganadería que le produjo la fatal cornada), si tenía algún toro de la camada del 2013, y maté dos toros en el campo que eran hermanos de camada de ‘Marqués’ y lo maté con el vestido de la cogida, los toreé y los banderillee. De ahí el vestido de torear se lo doné a mi Virgen del Desconsuelo de Jerez”.
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¿Sabes lo que hizo Padilla para quitarse los fantasmas tras la cornada de Zaragoza en la que perdió un ojo?
Lo contó anoche en el Toril.
Escucha aquí la entrevista completa
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