Si hay cosas que han quedado de manifiesto en la tarde de hoy, es que no siempre las mejores faenas van acompañadas de una Puerta Grande, que las faenas en Madrid, van condicionadas por el viento, y sobre todo, que una tarde como la de hoy, para bien o para mal, debería ir bajo un mismo hierro titular, y no de tres hierros -más el sobrero, cuatro hierros- Y es que hasta el día de hoy, la faena de la feria en la decimocuarta de abono, lleva el nombre de Emilio de Justo, que toreó bajo el paraguas del clasicismo al quinto de la tarde, al cual cuajó con profundidad y templanza por la diestra, pero que malogró su obra con la espada dejando un pinchazo en todo lo alto sin soltar. Y sí, hubo petición pero sin ser mayoritaria. Roca Rey, también tuvo la oreja en la mano con el tercero de la tarde, pero la espada no viajó certera, y Manzanares, sin tener las mejores opciones, quizá tampoco tuvo su tarde.