La esperada corrida concurso de Madrid se saldó con dos buenos e interesantes toros por encima de todos, los de Victoriano del Río por su emoción y el de Pedraza de Yeltes por su clase y casta. Ambos fueron a parar al lote de Gómez del Pilar, quien tuvo en su mano la oportunidad de salir a hombros tras dos faenas de buenos pasajes y de gran toreo sobre todo al natural con el de Victoriano del Río y con la diestra de rodillas con el de Pedraza. Finalmente, la espada se llevó su triunfo sobre todo con el de Victoriano al que le tenía la oreja cortada con fuerza. Serafín Marín y Rubén Pinar poco pudieron hacer solo demostrar sus ganas ante unos oponentes carentes de casta y emoción.